Eres leve, levísima en el mar mientras hinco
mis pies en la arena y somos fluido.
Las olas acunan nuestros adentros, opuestos.
El gusto, gustito, está escrito.
La aurora anuncia un nuevo sol,
el mismo y distinto.
Eres lábil en las yemas cuando transformas mi cuerpo,
helipuerto erizado, epitelio.
Me expando en piano, velero, nave al espacio.
Dentro justito.
M.