Archivo mensual: diciembre 2008

          Mientras el tiempo siga jugando a mi favor en forma de extremidades que se dignan correré el riesgo de moverlas. Se da por supuesto que uno no siempre estará a la altura de las circunstancias … Seguir leyendo →

    Mientras el tiempo sea ese grano de desierto que no acaba de colmatar mi vieja reloj de arena he de reconstruirme. Bien es cierto que los materiales ya están pedidos, un inmenso encadenado de treinta mil genes malditos … Seguir leyendo →

    Como los territorios de los que crees tener certezas y confías en andar a tientas al saber que siguen en ese mismo espacio al que con pasos mesurados te acercas. No había ruidos extraños: solo la respiración profunda … Seguir leyendo →

    Habrá un balance diáfano de toda una era, un borrón y cuenta nueva que febril nos alcance, un abrazo a un haya en la tormenta, antes que, ateridos y sin ropajes, nos empape toda la lluvia de sus … Seguir leyendo →

Tierra quemada en cada estancia es el bagaje de cada vida que vuelve, se repite y nunca será la misma, con la determinación –dicho- de la vigencia de la soledad que embarga, libre, fuerte, ajena, guiada. Al seno materno vuelva, … Seguir leyendo →

  Apenas revestido de la malla de la templanza hundí en la laguna del deseo mis aguas para elevarme a las bocanadas de la noche respirada que desemboca en el delirio del mar en marejada al alba. Vuelvo sobre mis … Seguir leyendo →

    Un cabo de vela te ofrezco para la cera virgen, una chispa en el ámbar del cedro, una aventura en el desierto… ¿qué menos que estando la voz te sirva de leve caricia que eleve tus duermevelas y … Seguir leyendo →

        No encuentro ganancia en mostrarme manso, infeliz, satisfecho o sancho, ni fabrico una especial manera distante de soportar ese frío que domina todo daño o el calor insoportable de quien se ciega en el abandono capitulando. … Seguir leyendo →

        Propongámonos una tregua, un armisticio: supongamos que no importa de dónde vengas, de donde vengo, desnudos desde un primer momento, sobrios hasta el último intento de no serlo, solos  cuando ya no quedan infiernos o cielos,… … Seguir leyendo →

      Un sentido Ya se fue pasando, el instante, ayer, de no estar en compañía, aunque es idéntico el estupor de darse cuenta de la soledad que la sorpresa de no tener a nadie. Nadie se da cuenta … Seguir leyendo →